El día 21 de marzo del presente año 2016 sucedió un fenómeno sin precedentes. El posiblemente último concierto de Lee “Scratch” Perry en Barcelona se llevó a cabo ese día y fue, sin dudarlo una velada apoteósica dónde convergieron en perfecta armonía ritmos jamaiquinos, oraciones rasta, y una cálida felicidad que envolvía el ambiente abarrotado de humo de marihuana. El evento empezó a las 21:00, los músicos que acompañaban a Scratch comenzaron con una instrumental que anunció la presencia del músico y la sala -que se encontraba impaciente por la llegada de tal semidios- rugió bizarramente al contemplar patidifusos a un octogenario Lee embutido en sus siempre escandalosos ropajes rindiendo como si aún no hubiera abandonado su tierna juventud.
[caption id="attachment_2949" align="aligncenter" width="500"] Foto: Víctor Gallardo[/caption]“Yo no voy a morir. Nunca. Solo mueren los que pactan con el demonio y yo no pacto con él”
Dijo Lee en una reciente entrevista. Nos quedó bastante claro a todos los presentes en el concierto que ganas de morir no tiene, hecho que corroboramos con sus exhaustivos bailes, salmos y vinos.
El concierto transcurrió con una vibración muy sentida, se habían interpretado ya unos cuantos temas del Super Ape, y un conjunto de clásicos como Disco Devil o Fisherman Dub,el público bailaba enloquecido cuando de pronto Perry se sacó de una bolsa -que podría haber pertenecido a un ermitaño alquimista- un peta que nada más encenderlo provocó euforia entre el público que le acompañó encendiendo más y más porros. Aquello elevó el evento a la magnitud de ritual: Era tal el misticismo que rodeaba a este genio que, de vez en cuando, se paseaba cerca de la primera fila e iba dando la mano a todo aquél que la acercara,como un profeta bendiciendo a sus fieles seguidores; Lee chamanizaba todo aquello hasta el punto de sanar con su música
[caption id="attachment_2972" align="aligncenter" width="500"] Foto: Víctor Gallardo[/caption]Al final, fue una lástima no poder conocerle en persona y poderos traer algunas palabras suyas dedicadas a este blog, pero al fin y al cabo, todo el concierto se podría traducir en un ritual religioso de una hora y media (aproximadamente) en los que sé convirtió, a quien no lo era, en eternos feligreses suyos porque ya os puedo decir que nunca voy a poder olvidar este espectáculo. Cuando le ví en el Rototom creí haber disfrutado de un enorme concierto de Lee Scratch Perry; Más lo sucedido en Sala Apolo ha sido un evento de una trascendencia superior. Su recuerdo me acompañará siempre y dado que una persona no muere del todo hasta que deja de ser recordada, puede que Lee “Scratch” Perry tenga al fin y al cabo razón y jamás muera.
[caption id="attachment_2960" align="aligncenter" width="500"] Foto: Víctor Gallardo[/caption] Poco más se puede contar del concierto ya que aquello debía ser vivido para poderse comprender al completo. Las palabras se quedan huecas al describir tal magnificencia sobre el escenario. Dado que como he dicho antes, no le pudimos conocer, creo firmemente que más temprano que tarde volverá para hacer otro ritual incluso mejor que el que nos proporcionó y ese día, podremos hablar con él un rato y compartir algunas opiniones. [caption id="attachment_2962" align="aligncenter" width="500"] Foto: Víctor Gallardo[/caption] Redactor: Amador Caño- Para ver el resto de fotografías del concierto, puedes entrar en el álbum de nuestra página de Facebook.