Después del prefestival, y de amanecer el primer día oficial del Rototom, Dapogyal y Tom se tuvieron que marchar, dejaron sus cosas plantadas debajo de nuestro árbol y me quedé con Maitía viendo pasar las nubes.
Como no teníamos mucho que hacer, nos dedicamos a dejar la vida volar, como decía Jara. Yo por mi parte empecé a disparar fotos cual francotirador no letal (ni ganas).

Maitía gozándose un buen bocadillo, este, de verdad. No le van los vegetales.

En algún momento tendría que ir yo a por mi acreditación, así que nos bajamos un momento a la carpa de acreditaciones para que me dieran mi pulsera, que de primeras parecía la de invitados pero resultó ser la normal de tres días. Ante esta situación, evidentemente me quedó claro que debía hacer algo para poder estar allí toda la semana.
Fue la primera casualidad del día encontrarme de cara con Pedro, también conocido como la primera persona que me dio trabajo y con el que me llevo muy bien. Así que le expliqué la situación y me dijo que miraría a ver si podía él hacer algo.
Teniendo ya un As en la manga, subimos de vuelta al camping a coger las cuatro cosas necesarias para ir a al primer concierto del festival.
Al rato, una chica apareció de la nada entre nuestras tiendas, y me dijo que yo le sonaba de algo. Resultó que a las compañeras de camping que teníamos delante les había hecho yo fotos hará unos dos años en el concierto de Skatalites. Casualidades de la vida. Al rato, y al ver que poco más podíamos hacer, bajamos al recinto a dejarnos envolver por los sonidos que nos iban a ofrecer.
Lila Iké, fue quizá el descubrimiento musical de este año en el Rototom. Apenas tengo constancia de más de cinco o seis temas suyos, y llegué a su concierto prácticamente de casualidad, junto con Maitía. El primer concierto del año.
Y ahí teníamos a otro de los grandes descubrimientos de Protoje, el segundo que venía al Main Stage del Rototom Sunsplash. Y menudo descubrimiento.
Estábamos los dos ojipláticos observando a esta jamaicana correr de un lado a otro del escenario sin pausa, pero claro, es joven, raro sería.
Gotty Gotty”  y “Second Chance” se dejaron sonar en el escenario. No podían faltar. Llegado el momento, la bajista empezó a tocar unos acordes que me sonaban demasiado familiares como para no reconocer el riddim de “Promised Land” de Dennis Brown (más conocido por ser también el “Land Of Promise de Damian Marley ft. Nas)
Incluso dejó caer “Sweet Motivation“, un buen unrelased para que nos fuesemos con buen sabor de boca, a mi entender, su mejor tema hasta la fecha.
El concierto duró poco, pero “meca”(goendios) con Lila Iké. El año pasado 2018 (o en 2017, ahora no recuerdo yo bien) ya vivimos una situación parecida con Koffee, que ni dios sabía quien era, y ahí estaba ella, con sus dos ovarios enfrentándose al Main Stage ella sola.
De verdad espero tener razón, acertar con la convicción de quien sea que pasa por el Main, ya no va a tener problemas para vivir de la música.
Where I’m Comming From“, y terminó el bolo. Terminó un bolo que marca historia, terminó un bolo que algún día, cuando Lila Iké sea la próxima Sister Nancy, les contaré a mis hij@s.

error: Content is protected !!